Fernando Ladislao

Músicos y modelo plasmados por el hábil grafito del señor Ladislao.

Fernando Marinelli

El maestro Marinelli nos envía estos apuntes.

Patricia Bianchi

Pato nos envía estos profundos retratos.

Hugo Horita

Hugo es descomunal.

Kalil Llamazares

Esto es lo que pasa cuando tomás y dibujás.

Alejandro Raymond

No lo aclaré en el post anterior. Estos textos fueron escritos por Alejandro mientras todos los demás, cortos de palabra, dibujábamos o tocábamos música. La avant-garde está en Buenos Aires, señores.



Como un curioso te clavo lo´ojo
sin miedo a ojearte
sólo ofrezco palabras
entre tanto arte.
Para iluminar esta Sol,
nerviosa llega hasta su lugar,
curvas para armar
van a salir de sus ropas.
La música esta en el aire,
dibujantes, poetas y curiosos,
todos saben de que se trata
y se animan de a poco, vinito a vinito
y cuando ya no esta la bata,
el cuerpo florece
y ya sin el vestido,
la mano se va acostando con el papel
para que los hijos, de lápiz en lápiz,
vayan naciendo,
acariciando,
aprendiendo a caminar.

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Cómo será la música
que teniendo a la mujer al lado
el guitarrista sigue abrazando a la guitarra.
Y estando la modelo en su lugar,
acostada, desnuda y a la vista,
los borrachos más despiertos
y más ociosos
sueñan
con que alguna otra chica,
una que hasta ahora era del público,
pierda su ropa y gane las ganas
de formar parte de un dibujo,
uno que las incluya,
que las una,
que las haga parte de la música.

Maxi Munoz

Notables dibujos del señor Muñoz.

Pablo Zweig

El señor Zweig inaugura en Recoleta el viernes. Se recomienda ir a verlo.

Lucas Nine 2

Más retratos de Lucas

Merino x Horita

Lucas Nine

Vladi nos manda, además de los dibujos posteados más abajo, estos Lucas Nines tremendos que se llevó a su casa.

Vladimiro Merino

¡Cómo dibuja este muchacho, madre mía!

Alegria del hogar

La señorita Alegría nos envía estas inspiradas tintas.

Kalil Llamazares

Fernando Glionna

El maestro Glionna nos envía estos bellos dibujos, cargados de emotividad bacanálica.

La Casita

Subo las escaleras y me recibe un guiso,
gente amiga me espera
y falta poco para que empiece a sonar el parrijazz.
Los dibujantes afilan sus lápices esperando a Sol,
la chica que le ofrece su cuerpo al papel,
dejando caer la inspiración
para que cualquiera la levante.

Un poco de bacanal
para ocupar
esa sed curiosa
de querer estar
donde se la pasa bien,
y otro poco de lupanar
para hacernos acordar
de donde venimos
y a donde nos acostamos.

Salud a los cuatro vientos,
las noches de luna llena
tienen el corazón contento.

Alejandro Raymond